Hoy sin duda el calor es nuestra mayor preocupación y se quedará por un tiempo más, antes que llegué el invierno…
Debemos recordar que en el invierno son más frecuentes las enfermedades respiratorias, que pueden ir desde un simple resfrío hasta complicaciones más graves derivadas de una gripe mal cuidada, como por ejemplo: bronquitis, neumonía o bronconeumonía. Más que el frío en sí del invierno, son los cambios bruscos de temperatura corporal y la humedad del ambiente los factores que favorecen la aparición de patologías respiratorias, provocadas por virus y bacterias.
APRENDER A DIFERENCIAR UN RESFRÍO DE UNA INFLUENZA
La Enfermera y Jefa de Carrera de Universidad La República, Cecilia Contreras León, explica que un resfrío común no debe pasar de cinco días y sus síntomas más evidente son, secreción nasal (de aspecto claro), cefalea (dolor de cabeza) y tos leve, esta sintomatología debe disminuirse paulatinamente y al día subsiguiente sentirse mejor”, puntualizó.
Ahora –enfatizó la Jefa de Carrera de Universidad La República- cuando el resfrío comienza a extenderse o se acompaña de fiebre sobre 38 grados, tos abundante, escalofríos o dolor de cabeza intenso, mialgias (dolor de músculos) y artralgias (dolor de articulaciones), cansancio o debilidad, diarrea y vómitos frecuentemente en niños, se requiere que los pacientes consulten lo más pronto posible porque hay que descartar otras patologías, “entre ellas está la Influenza, que puede llegar a ser mortal y con mayor riesgo en personas con edad extrema, niños y adultos mayores, como también personas con patologías crónica; Asma, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), inmunodeprimidos, mujeres embarazadas, etc., subrayó.
La profesional de la casa de estudios superior hace un llamado a la comunidad para que esté atenta cuando el Ministerio de Salud comience con la “Campaña de Invierno y vacunación”. Denotando que la vacuna no evita que la enfermedad se produzca, pero sí que se compliquen los síntomas”.
Entre las recomendaciones –destacó la Jefa de Carrera de Universidad La República- es abrigarse sin exagerar y mantener la casa ventilada, “El Ministerio de Salud ha sido categórico al señalar en sus diferentes campañas que es un error pensar que se debe tener todo cerrado para que la casa no pierda temperatura. Hay que ventilarla todos los días durante 15 minutos por 3 veces como mínimo, porque es la concentración del virus la que produce la afección”, sostiene.
RECOMENDACIONES BÁSICAS
Especial cuidado deben tener las personas alérgicas –precisó Cecilia Contreras- ya que cuando cursan un resfrío o una bronquitis tienen mayor secreción y obstrucción bronquial, “cuando se inicie un cuadro gripal, es recomendable que se cuiden más y usen los medicamentos que normalmente tienen prescritos para su alergia, que puede ser los antihistamínico o broncodilatadores”, señaló.
Por otro lado los pacientes con enfermedad crónica, como asma también tienen que tomar medidas, como abrigarse adecuadamente, tomar líquidos en cantidad suficiente de modo que la eliminación de secreciones sea más fácil y usar sus inhaladores, que evitan que el bronquio se obstruya y se infecte. Lo mismo pasa con los adultos mayores. Además de vacunarse, es conveniente que caminen, pues al estar en posición horizontal la ventilación pulmonar se ve disminuida.
Los fumadores son otro caso especial en cuanto a las infecciones respiratorias y suelen presentar una serie de complicaciones cada vez que se resfrían. A nivel broncopulmonar, el cigarrillo produce aumento de la secreción en la faringe, laringe y tráquea, además de irritación gástrica. “Eso, agregado a una infección viral, probablemente llevará a una bronquitis aguda”.
PRECAUCIÓN Y RESPOSABILIDAD CON EL USO DE ANTIBIÓTICOS