Tras presentar tres solicitudes de sobreseimiento al Juzgado de Garantía de Rancagua que fueron rechazadas con anterioridad, este martes la Corte de Apelaciones de la capital de la región de O’Higgins determinó acoger la petición de la defensa del hijo de la presidenta Michelle Bachelet, Sebastián Dávalos, dejándolo fuera de la investigación por la arista principal del caso Caval.
La defensa de Dávalos Bachelet, utilizó los mismos argumentos que fueron rechazados en diciembre pasado por el Juzgado de Garantía, esgrimiendo que en tres años de investigación su defendido no ha sido formalizado por los delitos que se le imputan.
Cabe señalar que la arista principal del caso Caval es la que se originó el 17 de enero de 2015, cuando la sociedad compró en $6.500 millones un predio en la comuna de Machalí, región de O’Higgins, que la familia Wiesner puso en venta a través del síndico de quiebras Herman Chadwick.
Arista por la que Sebastián Dávalos fue imputado por la Fiscalía Regional por los delitos de tráfico de influencias, revelación de secreto, uso de información privilegiada y negociación incompatible.
Los descargos de Sebastián Dávalos contra la Fiscalía regional
Luego que la Corte determinara su sobreseímiento, el hijo de la mandataria leyó un comunicado donde arremetió en contra de la Fiscalía regional y el persecutor Emiliano Arias, señalando que: “La muy corrupta Fiscalía, haciendo uso de la nomenclatura utilizada por el fiscal nacional (Jorge Abott), intenta formalizarme por un delito inexistente a modo de represalia, como ya ocurrió tiempo atrás en el caso de mi señora. Me pregunto si el actuar del Ministerio Público atiene a intereses particulares distintos al esclarecimiento de la verdad”.
Agregando que el caso Caval “hace muchos años que se transformó en un caso político”.
Sebastián Dávalos anunció que se querellará contra la Fiscalía liderada por Arias, por las supuestas filtraciones a la prensa: “Volveremos a Santiago a interponer una querella por filtraciones ante tribunales, para que sea el fiscal nacional, el superior jerárquico de esta Fiscalía, quien investigue los actos de corrupción que pudiesen haber ocurrido en la Fiscalía Regional de O’Higgins”, advirtió.
Asimismo, repasó que “una fiscalía corrupta no está en condiciones morales ni éticas de realizar investigación alguna. Y menos aún, de acusar o formalizar a algún ciudadano. La Fiscalía miente una y otra vez frente a tribunales y en la corte, atenta contra los principios de objetividad de los imputados y desconoce los acuerdos a los que ha llegado con los mismos, no está habilitada para investigar causa alguna”.